Explorando la asombrosa belleza de los fiordos leoneses

Un fiordo es un golfo estrecho y profundo, que circula entre montañas escarpadas. Así, no es más que un valle formado por escarpadas e irregulares montañas inundado por una entrada de mar que debe su origen a los glaciares de épocas pasadas. Cuando pensamos en fiordos, asociamos inmediatamente este nombre a Noruega, pero os sorprenderá saber que, en una pequeña localidad de Castilla y León llamada Riaño ubicada a 95km de León capital, podemos encontrar los famosos fiordos leoneses. Se podría decir que la existencia del mar es básica para la formación de un fiordo, pero aunque aquí no haya mar, las semejanzas de los fiordos noruegos con el paisaje de esta zona de la montaña de Riaño son indiscutibles, ya que su colosal embalse hace las funciones para que así sea.

Dónde están los fiordos leoneses

Riaño es un pequeño municipio de León situado en la cara sur de la cordillera Cantábrica. Está ubicado entre los ríos Yuso y Esla, que desembocan en un solo cauce en el río Esla, y está enclavado entre un extenso conjunto de elevadas montañas que conforman el Parque regional Montaña de Riaño y Mampodre.

 

fiordos riaño

 

Las rocas que forman este sistema montañoso son todas muy antiguas, intensamente deformadas por las orogenias de la zona, y aparecen plegadas y montadas unas sobre otras, sin ningún tipo de orden. A lo largo de los años, han mantenido un diferente comportamiento ante la erosión fluvial, y esto ha dado lugar a la formación de altas montañas, que con la inundación de sus valles, ha dado lugar a los llamados fiordos leoneses. Por este mismo motivo, y por el paisaje tan característico, a Riaño también se la conoce como la “Suiza española”.

 

Clima de la montaña de Riaño

 

Desde el punto de vista turístico, es uno de los destinos más importantes e impactantes de España, y el de mayor relevancia dentro de la región. Las repetitivas y abundantes precipitaciones que sufre la zona a lo largo del año, combinado con las abruptas montañas calizas, han dado lugar a la formación de profundos valles que fueron anegados por el embalse artificial creado en 1987, originándose así los fiordos leoneses.

 

Además, gran parte de estas precipitaciones son en forma de nieve, siendo uno de los climas más fríos y nevosos de la provincia. Los veranos pueden llegar a ser cálidos, aunque en julio y agosto las temperaturas nocturnas pueden bajar de cero grados. Las estaciones intermedias, otoño y primavera, se reducen a meras etapas de transición de unas pocas semanas. Hablamos, por tanto, de un clima continental que, unido a la elevada altitud media, se traduce en unas condiciones óptimas para el desarrollo del bosque atlántico y los famosos fiordos de los que hablamos hoy.

Fiordos leoneses qué ver

 

fiordos leoneses

 

La importancia de los fiordos leoneses es vital para la zona por muchos motivos. El primero y más importante, es que es un espacio natural único en España, cuyos paseos fluviales en barco de una hora de duración por un módico precio aproximado de 15€ ofrecen una vista espectacular de este impresionante entorno del embalse de Riaño. Ni que decir tiene todo lo que ello supone para el turismo, máxime si eres amante de la naturaleza.

 

Esta zona posee una riqueza en fauna y flora sin comparación; los hayedos, robledales y acebos, junto con una variopinta fauna formada por osos pardos, diferentes tipos de águilas, buitres, e, incluso, bisontes europeos en libertad que se introdujeron hace tiempo en Anciles, ofrecen a los naturalistas una oferta turística sin igual, y un ecosistema medioambiental único en España.

 

Igualmente, posee una riqueza artística y un patrimonio histórico exclusivo, que fue recuperado antes de las inundaciones artificiales para crear el embalse, y reubicado en otras áreas para salvarlas. Todos estos monumentos se pueden visitar a través de los diferentes senderos y caminos transitables de la zona, por diferentes rutas correctamente señalizadas, que harán las delicias de los senderistas.

 

Además de visitar los fiordos leoneses desde el barco, circulando a través de los brazos de mar que se infiltran entre las montañas, hay diversos miradores en las zonas altas de la montaña que se pueden visitar, y que te permiten disfrutar de otras panorámicas y perspectivas distintas, pero no por ellos menos atractivas para el visitante. Hablamos, por ejemplo, del mirador del Alto Valcayo o el de Las Hazas, que posee el columpio más grande de España, con vistas a 360º que ofrecen una impresionantes vistas de Riaño y de los valles inundados.

 

 

columpio mas grande españa

 

Si no queremos subir a las alturas, también podemos caminar por la parte baja de los fiordos a través de múltiples senderos y caminos, como el del Recuerdo, donde podemos visualizar gran parte de este patrimonio histórico salvado del embalse, como las iglesias de Pedrosa del Rey, un bonito templo románico, o Nuestra Señora del Rosario, un templo del siglo XIII, donde ambas albergan entre sus paredes numerosas pinturas románicas, barrocas y góticas. También encontraremos durante nuestro trayecto antiguos hórreos astur-leoneses, y si llegamos hasta el mismo Riaño, podremos sentarnos en el “banco más bonito de España”, con inmejorables vistas a los fiordos leoneses.

 

Museos en Riaño

 

Dentro de este área de fiordos leoneses, contamos también con importantes museos, como el Museo Etnográfico de la Montaña de Riaño, que además de recoger innumerables antigüedades de la zona, no deja de ser un homenaje a los pueblos inundados intencionadamente para la construcción del embalse, y que desaparecieron bajo el agua, como fueron Anciles, Éscaro, Huelde, La Puerta, Burón…y así hasta nueve pueblos que desaparecieron debajo del embalse y que se sacrificaron para un mejor desarrollo económico local.

 

Desde el punto de vista medioambiental, también los fiordos leoneses contribuyen al desarrollo de la zona puesto que proporcionan agua a los diferentes regadíos. Se han dado lugar 84.000 hectareas de nuevos cultivos que no existían antes de la creación del embalse, lo que contribuye sin duda a un mejor desarrollo económico de la zona, justificando así la creación del embalse años atrás.

 

Por todo esto, creemos que la visita a los fiordos leoneses es obligada para todos, ya que esta zona de España ofrece al visitante un sinfín de posibilidades exclusivas de la zona y es el sueño de cualquier viajero amante de la fauna y de la naturaleza. Además, las visitas responsables de los turistas ayudan a contribuir al desarrollo y conservación de este paraje sin igual español, así como al mantenimiento y difusión de proyectos tan peculiares como el que está llevando a cabo la Fundación “Valle del Bisonte Europeo”, en el valle de Anciles, la cual está intentando recuperar en régimen de semilibertad a este enorme mamífero originario del viejo continente, con el fin de crear futuras rutas guiadas donde poder ver a este animal en su ámbito natural.

Otros animales que viven en semilibertad en la montaña de Riaño son los bueyes de Valles del Esla, que se crían en un entorno tan privilegiado como el que os acabamos de enseñar, ni que decir tiene como este entorno afecta directamente a la calidad de su carne.


Valles del Esla | junio 16, 2023

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